El polivinil alcohol (PVA) se utiliza como un adhesivo biodegradable. El PVA tiene buena solubilidad en agua y buenas propiedades de formación de películas, lo que le permite actuar como pegamento para partículas en diferentes contextos. El PVA puede aplicarse en el sector de la construcción para cementos y morteros para mejorar la trabajabilidad, así como en la industria textil como agente de tamañado para hacer los tejidos más fuertes. El PVA es seguro y no tóxico, por lo que es un ligante ideal para fabricantes comprometidos con el medio ambiente.